La adaptación ha sido un tema clave para las organizaciones en 2024, y el NeuroLeadership Summit de este año está diseñado para ayudar a los líderes a prosperar en medio del cambio. Nuestro tema este año es EVOLVE: La Ciencia de la Cultura, el Liderazgo y el Alto Desempeño.
Si bien el Summit incluye a docenas de científicos, ejecutivos y expertos en liderazgo hablando sobre una variedad de temas, aquí hay tres tendencias especialmente relevantes para los líderes, todas relacionadas con la necesidad continua de evolucionar.
1. Inteligencia artificial
¿Cuál es el papel de la IA en el lugar de trabajo? ¿Es una herramienta para el aprendizaje? ¿Para la colaboración? ¿Para la creatividad? Una encuesta de Forbes Advisor de 2023 encontró que el 64% de las empresas espera que la IA aumente la productividad. Sin embargo, muchas personas siguen siendo escépticas sobre el verdadero potencial de la IA y están preocupadas por los riesgos.
Este año, el Summit explorará el mundo de la IA y su poder como herramienta para la innovación. ¿Cómo ocurre la creatividad en el cerebro, y cómo pueden las capacidades actuales (y futuras) de la IA apoyar las formas en que los humanos piensan naturalmente?
La mayoría de las organizaciones implementan IA para mejorar la eficiencia o reducir costos, lo que puede parecer deshumanizado. La ironía es que la implementación efectiva de la IA requiere que entendamos el comportamiento humano. Este año, el Summit ofrecerá valiosos insights sobre cómo nuestros esfuerzos actuales están ayudando o perjudicando este proceso.
NO TE PUEDES PERDER: Innovación y Creatividad en la Era de la IA, con:
- David Rock, Ph.D., Co-Fundador y CEO, NLI
- Christine Chesebrough, Ph.D., Neurocientífica Cognitiva, The Feinstein Institutes
- Batia Weisenfeld, Ph.D., Profesora de Management, Universidad de Nueva York
- Jon Schooler, Ph.D., Profesor Distinguido de Ciencias Psicológicas y del Cerebro, Universidad de California, Santa Bárbara
2. Desarrollo de liderazgo
No hay otra forma de decirlo: el desarrollo de liderazgo está roto. A medida que la vida organizacional ha adoptado diversas formas de trabajo híbrido, los ejecutivos están luchando por descubrir cómo nutrir a la próxima generación de líderes. Incluso antes de la pandemia, muchos nunca aplicaron la ciencia de la activación de hábitos necesaria para construir habilidades duraderas.
Si las organizaciones quieren ser competitivas en 2025 y más allá, deben tomarse en serio la ciencia del cambio de comportamiento. Específicamente, deben prestar atención a conceptos como el aprendizaje social, la formación de hábitos y la escalabilidad de sus esfuerzos de aprendizaje a lo largo de toda la organización mediante las plataformas adecuadas.
Por ejemplo, no es cierto que sólo unos pocos directivos de la empresa necesiten aprender, mientras que todos los demás se las arreglan sin un desarrollo continuo. El aprendizaje funciona mejor en un modelo de “todos para todos”, donde las personas comparten constantemente sus insights y construyen nuevos conocimientos. Romper este mito, y otros, es esencial para desarrollar a la próxima generación de líderes de alto rendimiento.
NO TE PUEDES PERDER: Desafiando las Convenciones en el Desarrollo de Liderazgo, con:
- David Rock, Ph.D., Co-Fundador y CEO, NLI
- Moran Cerf, Ph.D., Científico, Universidad de Columbia
- Kath Carmean, M.B.A., Socia Senior en Desarrollo Organizacional, The Aerospace Corporation
3. Culturas de alto desempeño
Después de la pandemia, y en medio de la agitación social actual, muchos líderes están luchando por equilibrar la creación de una cultura laboral saludable y civil con las necesidades de la organización. ¿Te centras en la amabilidad y esperas que te siga el rendimiento? ¿O priorizas los resultados y confías en que las personas se alineen con esa misión? Creemos que ambos enfoques son posibles y necesarios.
La investigación sugiere que las culturas de alto rendimiento surgen cuando los líderes practican tres habilidades cognitivas: mentalidad de crecimiento, seguridad psicológica y accountability. Es decir, la cultura de su equipo valora más mejorar que ser el mejor; las personas se sienten seguras para asumir riesgos interpersonales; y los líderes establecen expectativas claras sobre los resultados deseados, que ellos mismos cumplen.
Una cultura saludable y el alto desempeño no son características excluyentes. Si se centran en los hábitos correctos, los líderes pueden liberar el potencial de las personas y crear un gran lugar de trabajo.
NO TE PUEDES PERDER: Construyendo una Cultura de Alto Desempeño, con:
- David Rock, Ph.D., Co-Fundador y CEO, NLI
- Anna Tavis, Ph.D., Directora del Departamento de Gestión del Capital Humano, NYU
- Janet Stovall, Líder Global de DEI, NLI
- Rachel Cardero, Vicepresidenta de Consultoría y Prácticas, NLI
- Dean Carter, Director de Experiencia, Airvet
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